En esta entrada queremos hablaros de badenes que, a la par de forzar la reducción de velocidad de los coches, aprovechan el paso de vehículos para generar energía y alimentar farolas, semáforos o señales luminosos en las calles.Cada uno de estos nuevos badenes cuesta entre 23.000 y 63000 euros, dependiendo del tamaño.
Consiste en una serie de paneles que, al pasar los coches, moverán una serie de engranajes situados bajo tierra que producirán la energía mecánica que luego se transformará en eléctrica. Con un tráfico estable, se podrían llegar a generar entre 10 y 36 KW.
10 de estas rampas podrían llegar a generar tanta energía como una turbina eólica. La diferencia entre este sistema y el tradicional es que el nuevo puede quedar totalmente plano para actuar simplemente como generador sin que los conductores noten nada, o subirlos para que actúen como un badén para reducir la velocidad.
Rafa Rodríguez. Grupo Renovatia 